¿Qué significa ser CTO en 2025? ¿Y cómo evolucionará esta figura en la próxima década? Para Jose Carlos Iglesias, la respuesta es clara: el Chief Technology Officer ya no es (solo) un rol técnico. Hoy es un arquitecto de valor, un conector de personas, negocio y tecnología, y un líder que traduce la complejidad en decisiones simples, útiles y estratégicas.
Desde Vigo, Jose Carlos lidera la unidad de Datos y analítica avanzada de Capgemini, y lo hace con una visión más centrada en las personas, en la cultura y en el impacto, que en el control o el código. En esta entrevista, hablamos sobre el rol del CTO, sus retos y aprendizajes… y sobre cómo, muchas veces, los problemas más difíciles no se resuelven solo con tecnología, sino con escucha, observación y trabajo en equipo.
CTO: un rol en plena transformación
“El CTO dejará de ser el jefe de tecnología para ser el impulsor estratégico de la empresa.”
Jose Carlos habla sin artificios. Sabe que la velocidad del cambio obliga a repensar constantemente los roles en las organizaciones, y el del CTO no es una excepción.
“El CTO del futuro será un perfil híbrido: dominará áreas como inteligencia artificial, cloud distribuido o ciberseguridad, pero también tendrá habilidades humanas como empatía, liderazgo transversal y comunicación clara. Y eso es lo que marcará la diferencia.”
Pero además de mirar hacia adentro, Jose Carlos ve a este nuevo CTO como una figura que también debe proyectarse al exterior:
“Representará la visión digital de la compañía. Será una voz que inspire tanto dentro como fuera de la organización, en comunidades, medios y foros tecnológicos.”
¿Cómo se llega a ser CTO?
“No se nace CTO. Se llega. Y a veces ni sabías que ese rol existía cuando empezaste.”
Jose Carlos lo tiene claro: su camino no fue lineal. Sus inicios estuvieron más cerca de la administración de sistemas que del desarrollo puro, y fue en la práctica —liderando proyectos, conectando personas, gestionando crisis— donde fue entendiendo que su lugar estaba un poco más arriba en la arquitectura.
“Me di cuenta de que disfrutaba más diseñando el por qué y el para qué de las soluciones, que el cómo técnico.”
Ese punto de inflexión le llevó a hablar con su jefe y plantear una idea: “¿Qué te parece si empiezo a hacer de CTO para la unidad?”
El resto es historia.
El reto de dejar de ser “el técnico que más sabe”
Uno de los mayores aprendizajes de Jose Carlos ha sido soltar.
“Pasas de ser la persona que resuelve cosas, a ser quien construye contextos para que otros las resuelvan. Y eso al principio cuesta. Porque dejas de tener control, dejas de ser ‘el que más sabe’.”
Pero eso no significa perder valor. Al contrario. Significa ganar perspectiva, visión, capacidad de orquestación. Y sobre todo, desarrollar lo que para él es la clave de este rol: liderar desde la confianza.
“Un CTO no escala por control. Escala por confianza.”
Lo que nadie te cuenta: gestionar la emoción, la presión y la narrativa
Más allá del conocimiento técnico y estratégico, hay un reto del que se habla poco: la gestión emocional.
“Como CTO, eres a menudo la bisagra entre la presión externa y la estabilidad interna. Tienes que estar disponible, presente y sereno… incluso cuando todo está ardiendo.”
También hay que aprender a traducir la visión tecnológica en lenguaje de negocio, a comunicar de forma que inspire, y a generar cultura más allá del organigrama.
Los dos consejos que marcaron su camino
- “Deja de intentar demostrar que sabes de todo, y empieza a crear el entorno donde todos puedan aportar lo que saben.”
- “No confundas urgencia con importancia.”
El primero le ayudó a soltar el micromanagement técnico y confiar en sus equipos.
El segundo le enseñó a enfocarse en lo que realmente mueve la aguja: cultura, visión, talento.
¿Qué recomendaría a alguien que quiere ser CTO?
Sin dar recetas, Jose Carlos comparte una brújula de cuatro coordenadas:
- Base técnica sólida, especialmente en cloud, datos y arquitectura.
- Capacidad de anticipar tendencias y convertirlas en decisiones estratégicas.
- Liderazgo consciente, que inspire y construya equipos resilientes.
- Curiosidad constante, para mantenerse relevante y aprender siempre.
“Participar en comunidades, leer, asistir a eventos, colaborar con otras áreas… todo suma.”
Una “batallita” para el recuerdo (y para la risa)
Jose Carlos cuenta con humor una de esas historias que lo cambiaron todo:
En una planta de fabricación, los sistemas caían sin explicación. Nada en los logs. Nada en los diagnósticos. Hasta que durante una llamada, escucharon una carretilla elevadora… y el sistema volvió a fallar.
Tras revisar, descubrieron que había un deterioro en el suelo justo encima de la fibra óptica principal. Cada vez que la carretilla pasaba con peso, cortaba la conexión.
“La solución fue surrealista, pero la lección aún más potente: no todos los problemas son tecnológicos. A veces, hay que escuchar más allá del teclado.”
El libro que más le ayudó como líder
A pesar de no leer demasiado sobre tecnología, hay un libro que marcó su evolución como CTO:
“Cómo ser un líder”, de Daniel Goleman.
Un clásico de la inteligencia emocional que le ayudó a entender que el liderazgo no va de tener todas las respuestas, sino de hacer mejores preguntas.
Conclusión: liderar con propósito
Jose Carlos Iglesias encarna una nueva generación de CTOs: líderes con una mirada integral, que entienden que la tecnología solo tiene sentido si mejora la vida de las personas, dentro y fuera de la organización.
“No lideramos servidores. Lideramos equipos, cultura, impacto. La tecnología es solo una herramienta para conseguirlo.”
¡Nos vemos en próximas entregas de perspectiva CTO!
