
En Coding Wonder Women, celebramos las historias de mujeres que no solo han encontrado su lugar en el mundo tech, sino que también inspiran a las futuras generaciones a romper barreras y seguir sus pasiones. Hoy tengo el placer de presentar a Tamara Kadyear Saber, una desarrolladora full stack que transformó su carrera profesional desde el mundo de la sastrería masculina hasta el desarrollo de software. Con casi tres años de experiencia en el sector, Tamara demuestra que con determinación, curiosidad y aprendizaje continuo, cualquier meta es alcanzable.
Conoce a Tamara
Tamara Kadyear Saber comenzó su carrera profesional en un ámbito completamente diferente: la sastrería masculina. Trabajó en prototipado para Zara Man (Inditex), una experiencia que le permitió desarrollar habilidades como la gestión de tiempos y la resolución de problemas bajo presión. En 2015, descubrió su interés por la tecnología al crear pequeños proyectos de maquetación con HTML y CSS. Durante la pandemia, decidió convertir esa pasión en una nueva carrera, un cambio que la llevó a convertirse en desarrolladora web y, más tarde, en desarrolladora full stack con conocimientos en Cloud Computing.
Tamara se define como una aprendiz constante, siempre ampliando sus horizontes y haciendo preguntas para comprender mejor los desafíos que enfrenta. Su segundo apellido, Saber, refleja perfectamente su actitud hacia el aprendizaje y el crecimiento personal.
Logros y desafíos en el desarrollo full stack
Lo que más motiva a Tamara en su carrera es la posibilidad de crear soluciones prácticas y funcionales que realmente mejoren la vida de las personas. “Me encanta trabajar en la mejora de interfaces de usuario y ver cómo lo que hago ayuda a los usuarios de manera tangible. Es muy gratificante saber que lo que construyes tiene un impacto positivo,” explica.
Sin embargo, como toda carrera, también enfrenta retos importantes. En su equipo actual, Tamara ha asumido el rol de punto de contacto para Azure Cloud debido a su conocimiento sobre la plataforma. Este rol, aunque enriquecedor, a menudo requiere que dedique tiempo significativo a aprender y resolver problemas complejos en un área que no es su especialidad principal.
Para abordar estos desafíos, Tamara sigue un enfoque metódico: divide los problemas en partes manejables, investiga, y comparte sus hallazgos con su equipo. “A veces, el mayor reto no es solo encontrar la solución, sino asegurarte de que todos en el equipo la entiendan y puedan aplicarla,” comenta. Además, destaca la importancia de gestionar expectativas con los managers, especialmente cuando se necesita tiempo para investigar y aprender antes de implementar una solución.
La importancia de la comunidad y el aprendizaje continuo
Tamara cree firmemente en el poder de las comunidades tecnológicas para compartir conocimientos y superar desafíos. Aunque actualmente no pertenece a una comunidad formal más allá de Codemotion, recomienda aprovechar espacios como Twitch para aprender de otros desarrolladores y compartir experiencias. Además, destaca recursos como el blog Manz.dev por su documentación clara y accesible en español.
Para quienes se sienten intimidadas al unirse a comunidades de desarrolladores, su consejo es empezar acompañadas: “Busca un acompañante para tus primeros eventos. Ayuda mucho a romper el hielo.”
Diversidad e inclusión en tecnología
Aunque Tamara no ha experimentado discriminación de género en su carrera, reconoce que la percepción de que la tecnología es un sector masculino sigue siendo un obstáculo para muchas mujeres y niñas. “Creo que hacen falta más referentes femeninos, pero no solo hablando de cómo nos sentimos como mujeres, sino presentando temas técnicos de la industria,” reflexiona.
También enfatiza la importancia de crear espacios seguros donde las mujeres puedan expresar sus opiniones sobre cómo se implementan las políticas de diversidad e inclusión. Para ella, estas iniciativas deben ser prácticas y efectivas, asegurando que las voces de todos sean escuchadas y respetadas.
Consejos para las futuras generaciones
Tamara anima a las mujeres que están considerando una carrera en desarrollo de software a no tener miedo de preguntar. “No hay preguntas tontas,” asegura, subrayando que la curiosidad y la disposición para aprender son esenciales en el mundo tech. Además, les recomienda experimentar con pequeños proyectos personales para explorar nuevas tecnologías y mantener viva la pasión por la programación.
Además, recomienda aprovechar los recursos disponibles, como libros, newsletters y plataformas en línea, para mantenerse actualizadas y seguir aprendiendo. Su filosofía de aprendizaje continuo y su dedicación a superar desafíos son un ejemplo de cómo el esfuerzo y la curiosidad pueden abrir puertas en la tecnología.
La historia de Tamara Kadyear Saber es un recordatorio de que nunca es tarde para reinventarse y perseguir una carrera en tecnología. Su dedicación y pasión por el aprendizaje constante son un ejemplo para todas aquellas que sueñan con dejar su huella en el sector tecnológico. ¡Nos vemos en la próxima entrega de Coding Wonder Women!